sábado, 18 de febrero de 2012

II


Filos plomos,
siluetas largas vienen hacia mí.

Aún tengo ribetes celestes
cuando empiezo a tener frío.
¿O son rojos,
como estas nubes?

Luego, veo el mundo en la picada
de un ave
en el momento del celeste gris
cuando todo me da ganas de llorar.

Este es el momento de dolor del día
cuando el frío se tropieza
con miles de ojos nublados
que miran ocultarse al sol
como una luna amarilla y naranja.

I


Hoy la luz sofoca los espacios
de esta casa muerta,
y sudan los recuerdos
de otras tardes con más sol
en mi sonrisa.

¿Fue o no fue?, me digo
y luego siento aquel revuelo arrepentido
de una media sonrisa,
cuando cruzo el comedor
sin aire a tu cansancio,
y me quedo sentado
frente al proyector
y a nuestros cuadros viejos...

Y otra vez estoy cierto
que no hay sentido
en dormir aquí,
en que agonice aquí
otra oscuridad más
disolviéndose en tu ausencia.

AMANECE


Este es el momento
en que te encuentro

A mí

que vi traspasar el sol
las cortinas de mis ojos

lo único que entiendo esta mañana
al verte amanecer

es que te amo